Por Carola Matarazzo.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible no quiere poco. Su lema principal es: “No dejar a nadie atrás”. Sin embargo, sabemos que muchos brasileños ya han quedado atrás. Por eso nació el Movimiento por el Bien Mayor. Vinimos a movilizar a los compañeros. Esfuerzos agregados. Formar redes. Fortalecer la cultura de la filantropía en Brasil. Para asegurar así la inclusión de quienes no se han beneficiado de los esfuerzos de desarrollo realizados hasta ahora y evitar que más personas queden socialmente excluidas.
En este primer año, trabajamos en promover la marca, involucrar a la sociedad y en un gran proyecto para servir a organizaciones con impacto comunitario: la convocatoria para la selección de 50 OSC para apoyo financiero. Un camino prometedor para ampliar el potencial de la inversión social privada.
Pero a largo plazo tampoco queremos demasiado poco. Estamos trabajando en articular el sector e incidir en políticas públicas para un impacto sistémico. Garantizar una educación de calidad es el primer paso. Queremos más. Estamos sentando las bases para la construcción de una sociedad inclusiva y democrática, que incluye valorar la diversidad, reducir la pobreza y las desigualdades, hacer el país más consistente y justo.